No existe una edad específica para visitar al urólogo, quien es el especialista encargado de diagnosticar y tratar las enfermedades genitales y urinarias en el varón y las que son exclusivamente urinarias en la mujer. De modo que esta primera visita dependerá de las necesidades de salud de la persona.
No se puede precisar un tiempo límite para hacer una primera consulta con el urólogo, ya que desde el nacimiento se pueden presentar ciertas situaciones que luego de ser identificadas por el pediatra, requieren la intervención del urólogo, estas situaciones podrían ir desde una emergencia hasta trastornos de nacimiento.
En el caso de las infecciones de transmisión sexual y las mismas infecciones de las vías urinarias no existe límites de edad para padecerlas, lo mismo sucede con las salidas involuntarias de orina en la mujer (incontinencia urinaria) y con las famosas piedras (cálculos urinarios) que tanto malestar ocasionan, los trastornos de erección del pene, la eyaculación rápida, la pérdida o disminución del deseo sexual y con los problemas de fertilidad en el varón.
En los últimos años la presencia del virus del papiloma humano ha motivado consultas de jóvenes con el urólogo, ya que gran parte de nuestra sociedad joven padece esta condición.
Cada día se hace más frecuente que el hombre se interese por la parte estética de sus órganos genitales y otros llegan buscando sólo respuestas a ciertas interrogantes.
La consulta inicial con el urólogo para chequeo de próstata, debe ser realizada a partir de los 40 años de edad, siempre y cuando no existieran otras condiciones.
Este tiempo coincide con el crecimiento de la próstata y los hombres acuden sólo con el fin de realizarse dicho chequeo. Hoy día, se sabe que los rangos de edad para padecer trastornos de la próstata como el cáncer han disminuido considerablemente, situación que ha condicionado a hacer aun más temprano la visita al urólogo.
Ciertas situaciones condicionan la visita al urólogo, como es el caso de la inflamación de la próstata (Prostatitis), que se considera el motivo de consulta urológica más frecuente del varón.
La hiperplasia prostática benigna (agrandamiento de la próstata), podría ocasionar dificultades a nivel de la salida de la orina, lo que hace más urgente el chequeo de próstata.
Para detectar a tiempo todas estas afecciones, y más importante aun, para prevenir o identificar la presencia o no del cáncer de próstata, es prioritario el examen con el tacto rectal.
Estamos en la época en que la medicina preventiva ha superado las expectativas con relación a la medicina curativa y donde las personas han tomado más conciencia del valor que tiene la salud, es por ello que cada día el ser humano se muestra dispuesto a conocerse y reconoce que la salud no tiene precio.